REFORMA DE UNA VIVIENDA EN BARCELONA (Arquitectura-G)

Hoy inauguro la sección de BLOG ya que desde el principio el objetivo de este sitio web era principalmente mostraros mi trabajo, pero también tratar otros temas relacionados con la arquitectura o mostraros trabajos a mi parecer interesantes de otros compañeros de profesión, en definitiva, otra forma de conocerme y mostraros mis inquietudes y gustos. 

Y para comenzar dedico este primer post al magnifico trabajo del equipo de Arquitectura-G en la reforma de una vivienda de 160 m2 en Barcelona.

La vivienda, antiguo piso señorial del centro de la ciudad, mostraba inicialmente una secuencia de habitaciones encadenadas, común en este tipo de viviendas, y comunicadas entre sí mediante puertas de dos hojas, así como a través de un corredor de servicio anexo a las mismas.

La propuesta mantiene este esquema dada la flexibilidad que ésta proporciona y potencia como elemento clave del proyecto LAS PUERTAS, herramienta a partir de la cual se pretende manifestar la adaptabilidad de la vivienda, pudiendo multiplicar la dimensión de cualquier estancia manteniendo algunas de ellas abiertas o incluso llegar a una situación de permeabilidad absoluta cuando la totalidad de puertas estén abiertas. Por contra, se pueden conseguir distintos niveles de compartimentación según los requisitos de uso, numero de habitantes, etc.

Se mantienen o desplazan puertas existentes y se introducen otros tipos: correderas, puertas en abanico…enfatizando que cada estancia mantiene una relación directa con la contigua.

Y dentro de  este esquema original, únicamente se decidió cambiar de posición las estancias húmedas: cocina y lavabo. La cocina se ubicó en el acceso a la vivienda, acabando así con el hall, cuyo tamaño era insuficiente para entenderse como una habitación más de uso intercambiable.

El nuevo lavabo fue el encargado de acabar con el antiguo pasillo de servicio, apropiándose de él, para conseguir así un aumento de dimensión que facilitara entenderlo como una gran habitación de aseo, donde se agruparan los dos baños completos que acompañaran a dos hipotéticas habitaciones, y el de cortesía, pudiendo entremezclarse o independizarse a voluntad del usuario.

Si bien el esquema distribuidor de la vivienda se mantiene en gran medida, no se puede decir lo mismo del trabajo de interiorismo, en el que se lleva a cabo un cambio radical de imagen.

La acertada elección de acabados tradicionales como solerías hidráulicas, la recuperación de radiadores clásicos, el mantenimiento de molduras de yeso, la restauración de puertas originales, los techos de bovedillas vistas en algunas estancias…en contraposición con elementos más actuales como el mobiliario de acero de la cocina, aportan un carácter y una personalidad única al espacio, haciendo de esta reforma un interesante trabajo de interiorismo.

[Texto: Ana Muñoz González]

[Fotografía: José Hevia]